¿Qué pasa cuando una leyenda del metal pierde interés en uno de los guitarristas más icónicos del rock? Eso es precisamente lo que Kerry King, el legendario guitarrista de Slayer, reveló en una entrevista reciente. King compartió sus primeras impresiones de Eddie Van Halen, y explicó cómo y por qué se fue desilusionando de su música con el paso de los años.
El impacto de Eddie Van Halen en sus comienzos
En sus años iniciales como guitarrista, Kerry King no era ajeno al atractivo de Eddie Van Halen. Como nos cuenta, estaba totalmente impresionado por el talento del prodigioso guitarrista de Van Halen: «Al principio, fui un verdadero fan. Vi a la banda en vivo seis veces durante las giras de sus cuatro primeros álbumes. Lamentablemente, me perdí la del primer disco porque era demasiado joven.»
King recuerda esos conciertos con precisión quirúrgica, observando con atención a Eddie desde la primera fila: «Me colocaba en primera fila con binoculares, no solo para disfrutar de mis canciones favoritas, sino también para analizar cada movimiento y entender cómo lo hacía.»
Un cambio de dirección y desinterés
Sin embargo, la fascinación de King por Van Halen no duró para siempre. Conforme el grupo comenzó a acercarse más al pop comercial, King empezó a perder el interés: «Se transformaron en un grupo pop y dejé de ir a sus conciertos. Eddie seguía siendo un guitarrista increíble, pero simplemente ya no me importaba.»
Para Kerry King, el cambio estilístico de Van Halen, de ser un referente explosivo del Hard Rock a adoptar una estética más mainstream, selló la decadencia de su interés personal por la banda.
Un lamento inesperado
A pesar de la admiración que sentía por Eddie, King nunca tuvo el placer de conocerlo personalmente. Para alguien tan consolidado en la industria musical, resulta sorprendente escucharle decir: «Nunca lo conocí. Hay muy pocas personas en este mundo de las que pueda decir eso, pero Eddie es una de ellas. Simplemente, nuestra trayectoria en el mundo de la música nunca coincidió.»