¿Alguna vez has esperado un concierto tan ansiado para que luego te lo cancelen en el último minuto? Eso es exactamente lo que les ocurrió a los seguidores de Nile en Marsella; una situación que dejó a todos con ganas de más y que ha resonado en la comunidad metalera.
Una cancelación inesperada
El pasado 10 de junio, Nile se vio forzado a cancelar su actuación en Marsella a escasas horas de subirse al escenario. ¿La razón principal? La sala Le Molotov ciertamente no estaba preparada para recibir la maquinaria de luces y sonido del grupo, lo que hizo imposible el show. En sus redes sociales, los miembros de la banda no ocultaron su decepción ante lo ocurrido. Tenían una gran ilusión por tocar en la ciudad francesa, ofreciendo sus disculpas a los fans que esperaban ansiosos. Agradecieron también al promotor local, Pierre, por intentar hasta el último segundo que la magia ocurriera. Decepción pura en el aire.
Una gira francesa fallida
Esta presentación formaba parte de una mini-gira francesa; un par de conciertos que incluía Marsella y Toulouse, fijado para el 11 de junio. Por desgracia, la comunicación oficial llegó por la mañana mismo del día, pero del tan esperado show en Toulouse todavía no se sabe mucho. ¿Podrán los fans de Toulouse celebrar el metal esta noche? La incertidumbre persiste.
La odisea de Nile en tierra gala
Parece que pasar por Francia no es tarea fácil para Nile, y este evento no es la primera dificultad. Hace casi un año, en su paso por el Hellfest 2024, tocaron sin Karl Sanders, quien estaba hospitalizado en esos días. Sin embargo, el grupo se mantuvo al pie del cañón, entregando su presentación con todo el poder que pudieron reunir, algo de lo que hablaron con orgullo. La batería tenaz de George Kollias no dejó que el espectáculo decayera, aún sin Sanders, un verdadero acto de resistencia ante la adversidad.
Pese a todo, Nile ha confirmado que planean volver a Francia como parte de una futura gira europea en 2026. Mientras tanto, sus adeptos cruzan los dedos para que el concierto en Toulouse no corra la misma suerte que el de Marsella.
